Fue diseñado por Mario Botta y realizado en 1995.
Es una obra monumental hecha mediante volúmenes sencillos y herméticos con grandes bloques de ladrillo y piedra, carece totalmente de ventanas solo deja entrar la luz natural por algunas rendijas y aberturas en el muro, a pesar de eso la mayoría de las salas están iluminadas por luz natural cenital. Las salas de exposición se encuentran sin ningún piso encima gracias al escalonamiento del edificio, el resto de compartimentos se dedican a otros usos como oficinas o salas de conservación.
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